Reduce el estrés con la respiración consciente. Mar Herrero. Mindfulness.
Hola, ¿qué tal estás? Bienvenido a una nueva práctica de mindfulness. Soy Mar Herrero, instructora mindfulness y hoy quiero hablarte sobre la respiración consciente.Respiramos de forma automática, sin pensar mucho en ello. Pero, ¿por qué sería importante prestar atención a la respiración? La respiración consciente tiene múltiples beneficios comprobados científicamente.Primero, el propósito fundamental de la respiración consciente es anclarnos en el momento presente, lo cual es clave para reducir el estrés y dejar de preocuparnos por el pasado o el futuro.Además, se ha demostrado que la respiración consciente reduce la ansiedad, alivia el agotamiento, aporta ciertos tipos de alivio del dolor y disminuye los pensamientos negativos que aumentan el estrés.La atención plena consiste en enfocar la mente en el aquí y ahora: en ser conscientes de las sensaciones en el cuerpo y en la mente, y en observar los pensamientos sin juzgarlos, especialmente aquellos que alimentan el estrés.El doctor Judson Brewer, director de investigación e innovación del Centro de Atención Plena de la Universidad de Brown, explica que “la atención plena a la respiración nos da un ancla para el momento presente, porque nuestra mente suele estar distraída, preocupada por el futuro o lamentando algo del pasado. Cuando tenemos este ancla, somos más capaces de manejar lo que la vida nos depare,” incluyendo situaciones que nos generan estrés.Guía para esta práctica de respiración consciente para reducir el estrés:Ponte en una posición cómoda, sentado o tumbado. Escoge una postura en la que puedas relajarte y en la que tu respiración fluya libremente, sin restricciones.Comienza a notar tu respiración. Inhala y exhala de manera natural y observa cómo se siente cada respiración. ¿Es corta o larga? ¿Profunda o superficial? Nota también las pausas que suceden al final de la inhalación y antes de la exhalación, y viceversa.Observa el cuerpo. Fíjate en las sensaciones físicas asociadas a la respiración. Pregúntate: ¿Dónde sientes más claramente la respiración? ¿Es en la nariz, el pecho o el vientre? Este enfoque ayuda a liberar las tensiones que acumulan el estrés.Sin juzgar. Es normal que la mente se distraiga. Cuando te des cuenta de que tu mente ha divagado, simplemente vuelve a centrarte en la respiración y en las sensaciones que la acompañan, con amabilidad y sin juzgar, para reducir el impacto del estrés en tu experiencia.Evalúa al finalizar. Al terminar, toma un momento para notar cómo te sientes. ¿Percibes alguna diferencia en tu cuerpo? ¿Estás más relajado? Observa sin juzgar; no hay nada bueno o malo.Si te cuesta mantenerte presente y concentrado en la respiración, no estás solo. El doctor Brewer comenta que él mismo tuvo dificultades para sentirse cómodo con la respiración consciente durante años. Su consejo es mantener una actitud curiosa hacia la respiración, sin obsesionarse con “respirar perfectamente.”Recuerda que no necesitamos más estrés preocupándonos por si lo hacemos “bien” o “mal.” Simplemente observa tu respiración y con eso es suficiente.¿Te animas a intentarlo? Comencemos.