Los Sangre Espectral son los protagonistas de este episodio, y Pati tiene mu-chas pre-gun-tas. Shallan va en misión reconocedora tras una conexión un poco mala por vinculacaña y conocemos a Mraize (y tenemos muchos comentarios al respecto). Enumeramos los tesoros de su colección e intentamos localizarlos en el Cosmere, los Crípticos siguen ganando la batalla en utilidad a los honorspren, y Sanderson decide darnos un respiro en el siguiente capítulo con un preciso corte a… ¡Renarin cenando en Esquirlada! Adolin se viene arriba al ver a cierta Veden en el campo de entrenamiento (y se lleva un repasito), Kaladin se mofa máximo, Moash confiesa y Lour nos cuenta cosas sobre Macaulay Culkin.
Shallan se autoinvita al campamento del “tito” Sebarial, que tiene tremenda mentalidad de tiburón (para sorpresa de muchos), y mientras nos recuerda tiernas escenas de los hermanos Davar bonding y Pati aprovecha para desRAFearse; conocemos a la Diva Palona lo cual nos deriva a una discusión sobre las diversas uñas rosharianas; Sof nos cuenta anécdotas sobre desmayarse y lo más cerca que estuvo de revivir el meme de “dónde está Patroclos”; hablamos sobre comer cosas vivas (… ¿gracias, Roca?); Kaladin masterea la gravedad y aprovecha para diagnosticar casualmente a Renarin, que aparece en el campamento para lavar platos para absoluta delicia del Puente Cuatro (jaja no).
Proseguimos la racha del episodio anterior empezando con chistes malos, nos enseñan ascensores estratégicos, aprendemos glifos e intentamos enumerar a los altopríncipes… Pero para qué engañaros. Sanderson nos confluye a sus protagonistas y… BIENVENIDOS A LA PELEA DE SHIPS. ¿Ganará el enemies to lovers? ¿Shippeamos todas lo mismo? ¿Por qué no es capaz ni el propio Adolin de seguirse el ritmo con sus amoríos? ¿Le faltaba a Dalinar ser sujetavelas para su desarrollo de personaje? ¿Funcionan estas Armas de Seducción Veden? ¿Por qué me alegra tanto ver a Amaram despechado?
En todos los libros hemos tenido un episodio más caótico que el resto: y este es ese. Con unos interludios que son breves pero jugosos, vemos a Eshonai modo Predator antes y después de la Influencia en un POV de los “Escucha-Oyentes” según Sof; Pati resume un “curioso” punto de vista de Zahel; a Lour le da su risa rasposa y confunde a Rysn con Rhysand; ofrecemos un minitutorial express de Cómo Sobrevivir; Un Heraldo viene a verme y Lour suelta un spoiler (que cortamos, tranquilos) por si os estabais durmiendo en los laureles xd.
No estaríamos leyendo Palabras Radiantes si Sanderson no nos pusiese minisanderlanchas a medio camino como si fuera esto un paseo en el parque. Pero sí que lo estamos leyendo, y tras la advertencia de Syl, llega El Que Odia. Elhokar se da a la bebida, Tyn se calcina un poco-mucho, tenemos crisis de identidad, sentimos las altatormentas en las articulaciones (¿estoy vieja o tengo un honorspren?), Dalinar se saca los movimientos prohibidos y da un aplauso muy a tiempo, y regresa uno de los personajes más queridos del Archivo.
Dos ávidas lectoras acompañan a una sufridora en su primer viaje por el universo literario del Cosmere, creado por (el amo y señor) Brandon Sanderson. Uníos a Sof, Lour y Pati mientras van desgranando tramas y enamorándose de sus personajes. Juntas, las tres irán conociendo y redescubriendo las historias, y haciendo cómicas y aventuradas predicciones de las que las veteranas intentarán no mofarse (o eso dicen).