Como en las partituras, la Iglesia nos invita en Adviento a vivir día tras día el crescendo, que culminará en el fortíssimo de la Navidad. La liturgia nos alienta en la esperanza, sabiendo que esta no se refiere tan solo al futuro, sino que se verifica en cada instante: Dios es el que viene, en un presente continuo. La espera de Dios fundamenta nuestra esperanza.
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2025-12-14 Haz silencio y Dios te hablará
El Señor invitaba a sus apóstoles a ir con Él a un lugar apartado y descansarán un poquito. El descanso no es ir “sin Él”, sino todo lo contrario: una más intensa compañía con Él. A Dios se le encuentra en lo interior y ahí se le oye: hacer silencio es requisito indispensable.
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2025-12-13 Aprovecha la riqueza de los salmos
Tenemos un gran tesoro, preparado por Dios para ayudarnos a crecer en la vida de oración: los salmos, en los que la palabra de Dios se hace oración del hombre. ¿Sabemos aprovecharlos? Los salmos son como espejos de nuestra alma, que nos ayudan a expresar lo que tenemos dentro y quizá no sabemos cómo decirlo. Busquemos identificar algunos salmos que salgan al paso de esos momentos de indefinición en la vida espiritual.
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2025-12-12 Un regazo para nuestra indigencia
Para resolver lo insoluble, el remedio es claro: acudir a María. Eso hizo san Josemaría al venir a Guadalupe. Busquemos también nosotros el refugio del regazo de María, que en las apariciones de 1531 quiso mostrarse como Madre amantísima. Cualquier existencia que no sea la de una perfecta unión con Dios en el regazo de María, es demasiado complicada.
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2025-12-11 Tratarlo
Con el espíritu de sabiduría nos es dado re-conocer a Jesús. Es verdad que lo conocemos, pero estamos invitados a que ese conocimiento sea más continuo. La vida de fe es convencerse de que Jesucristo vive. Como Dios es Omnipresente, en todo lugar y en cualquier instante podemos encontrarlo. La fe operativa no se limita al enunciado, sino que nos lleva a estar siempre hablándole, oyéndolo, amándolo.
Pláticas de contenido espiritual, también llamadas “meditaciones”. Pueden ser una ayuda para tu trato con Dios. Estas meditaciones han sido predicadas por el Pbro. Ricardo Sada Fernández y han sido tomadas de la página http://medita.cc