Una vez leí sobre un hombre que, en la cima de su desesperación, fue invitado a una iglesia. Sin saber qué esperar, entró y escuchó sobre el amor de Jesús. Ese día experimentó un encuentro que transformó su vida para siempre. Ese hombre, que había perdido toda esperanza, encontró un propósito eterno.
Los pastores de Belén tuvieron un encuentro similar. Cuando llegaron al pesebre, vieron a Jesús, al Salvador prometido y sus vidas cambiaron radicalmente. No solo lo adoraron, sino que también llevaron las buenas nuevas a todos los que encontraron. Un encuentro con Jesús siempre marca un antes y un después en nuestras vidas.
El día de hoy busca ese encuentro con Jesús. Permite que Su amor transforme tus pensamientos, tus decisiones y tu futuro. La Biblia dice en Lucas 2:16:
"Y vinieron deprisa, y hallaron a María, y a José, y al niño acostado en el pesebre".
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122524 - Navidad El Regalo Que Cambió Todo
En una remota aldea de la India, una familia extremadamente pobre llevó su regalo de Navidad a un misionero. Era un objeto muy valioso para ellos, envuelto en hojas de palma. Al ser preguntados por qué entregaban algo tan preciado, respondieron: “No podemos quedarnos con lo mejor cuando celebramos al Rey que dio Su todo por nosotros” Sus palabras reflejan el espíritu más puro del dar.
Hoy celebramos el regalo más extraordinario que el mundo jamás ha recibido: Jesús. Dios no envió riquezas ni poder, sino a Su propio Hijo, envuelto en la humildad de un pesebre. Este regalo no solo cambió la historia, sino también nuestras eternidades. Su sacrificio abrió el camino hacia la salvación, la paz y una esperanza inquebrantable. En Jesús encontramos todo lo que nuestro corazón anhela.
Esta Navidad, recibe este regalo con un corazón lleno de gratitud. Adora al Rey que dejó Su trono celestial por amor a ti. Deja que Su amor transforme tu vida y comparte Su mensaje con quienes te rodean. La Biblia dice en Isaías 9:6:
"Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz".
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122424 - Nochebuena: Gloria En Lo Alto
En una obra de arte renacentista, un pintor anónimo representó a los ángeles rodeando al pesebre en un círculo de luz. Sus expresiones no solo reflejan asombro, sino también una adoración profunda. Esa escena captura lo que ocurrió en la primera Nochebuena: “el cielo proclamó la gloria de Dios mientras la tierra recibía a Su Salvador”.
Esta noche recordamos que Jesús no solo trajo salvación, sino también reconciliación entre Dios y la humanidad. Su nacimiento marcó el inicio de una esperanza que nunca se extinguirá. Así como los pastores dejaron todo para adorar al Rey, hoy somos llamados a rendirnos ante Él.
Por lo tanto, adora a Jesús con todo tu ser en esta Nochebuena y deja que Su presencia llene tu hogar de Su esperanza, gozo, paz y amor. La Biblia dice en Lucas 2:14:
"Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres".
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122324 - El Tesoro En Lo Humilde
Una vez, un arqueólogo descubrió un vaso de barro aparentemente insignificante. Sin embargo, al abrirlo, encontró pergaminos antiguos que contenían tesoros de sabiduría. Lo valioso no estaba en el recipiente, sino en lo que había dentro. Esta historia refleja cómo Dios elige lo humilde para manifestar Su gloria.
Jesús nació en un pesebre, un lugar sencillo y sin pretensiones. Aunque el mundo lo consideraba insignificante, Su nacimiento trajo salvación y esperanza eterna. Dios no busca lo grandioso a los ojos humanos, sino corazones dispuestos para llevar Su tesoro eterno.
Recuerda que tu valor no depende de tus logros, sino del tesoro que Dios ha depositado en ti. Vive con confianza, sabiendo que Su poder se perfecciona en tu debilidad. La Biblia dice en 2 Corintios 4:7:
"Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros".
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122224 - La Brújula De La Vida
En una expedición al Ártico, un explorador enfrentó una tormenta que desorientó a su equipo. Sin puntos de referencia y con visibilidad casi nula, la situación parecía desesperada. Sin embargo, el explorador sacó su brújula y confiando en su aguja, pudo guiar a todos de regreso al campamento seguro. La brújula, aunque pequeña, fue crucial para su salvación.
Los sabios de Oriente también tenían una guía: “una estrella que los condujo hasta Jesús”. No era solo un fenómeno astronómico, sino una señal divina que los dirigía al Rey de reyes. Su viaje fue largo y desafiante, pero su fe en la guía celestial los llevó a encontrarse con el Salvador.
Hoy, en medio de las incertidumbres y decisiones de la vida, Jesús es nuestra brújula. Su Palabra y Su Espíritu Santo nos orientan, mostrándonos el camino correcto. Cuando confiamos en Él, podemos navegar por las tormentas con la seguridad de que nos llevará a puerto seguro. La Biblia dice en Juan 8:12:
"El que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida".