

Lucas 2, 1-14
24/12/2025 | 2 min
En espera1) Emperador: Jesús nos enseña que el verdadero poder lo tienen la humildad y la sencillez. Mucha gente buscó ser eterna o reconocida, hasta incluso buscó con sus obras arquitectónicas quedar marcadas, pero hace más de dos mil años que se recuerda a unos pastorcitos, un burro, una vaca y un pesebre sencillo. Porque cuando uno busca tener poder en la vida o en el trabajo o hasta incluso en la iglesia, la misma vida le muestra que ya no vive por vivir, sino por mantener algo que tarde o temprano se desecha. Por eso, este día es un golpe a nuestra soberbia y comprender que el poder es adictivo y también momentáneo, por lo tanto, no dejes que el poder sea tu presa. 2) Pertenecer: Es importante saber que todos tenemos un sentido de pertenencia, asumir en qué y con quién nos identificamos. Por tanto, no dejes de alimentarte de la gente que te hace bien y esta noche trata de mirar a los que comparten con vos qué pudiste aprender. Saber a dónde perteneces se basa en tener autodisciplina y no andar con caprichos emocionales en la vida. Comprender que yo no soy de nadie y menos un juguete de alguien me ayuda a comprender que soy hijo de Dios y solo eso vale. 3) Pastores: Hay una frase de Mario Benedetti que dice “Cómo me gustaría pasar el resto de mis días con alguien que no me necesite para nada, pero que me quiera para todo”. En esto me encanta pensar en los pastores, porque fueron solo a adorar, no fueron a pedirle a Jesús que les cambie la posición social o un milagro, ellos solo fueron a adorar porque solo querían estar con Él. Adorar es lo que implica esta fiesta, porque Dios se hizo hombre para que el hombre goce de Dios. Algo bueno está por venir.

Lucas 1, 57-66
23/12/2025 | 3 min
Dio a luz1) El tiempo: El tiempo es importante y necesario, porque el día que siembras no es el día en el que recoges el fruto. Todas las cosas buenas toman tiempo y también constancia. Tiempo y constancia son los que te llevan a obtener los resultados. Uno debe seguir los procesos. Ser impaciente en ciertas circunstancias está bien, porque te hace trabajar más, pero, si la impaciencia te lleva a abandonar lo que estás realizando, entonces puede que pierdas el tiempo. 2) Enterarse: Si hay algo que aprendí en este 2025 es que ser empático siempre, constantemente, no es sano. Hasta tuve que reunirme con el Consejo Parroquial para decirle a mi gente de la parroquia que hay cosas que ya no voy a poder hacer, porque por estar atento a todos me desatendí a mí, hasta el médico me lo dijo, que tenía que bajar un cambio. Hay veces que encontramos personas que te tratan mal, que no les importa si vos estás bien o estás mal. Ellos quieren lo suyo y punto, que hasta incluso te hacen daño y vos te pones en su cabeza para entender por qué lo hacen, y hasta llegas a justificar el por qué actúan así con vos. Yo también la he pasado mal y no traté mal a nadie. Trato de nunca tratar mal a nadie, porque nadie se merece ser tratado mal. Por lo tanto, poné límite a tu empatía y no trates de entender qué se esconde detrás de cada pensamiento. No todo tiene explicación, pero si no pones límite a las personas que te tratan mal, puede que luego te empiecen a contaminar. 3) El habla: Una vez leí que un león no ruge antes de la caza. Ruge después de atrapar a su presa. Por tanto, no andes diciendo a todo el mundo qué es lo que vas a hacer o el siguiente paso de tu vida. Trata de actuar y moverte en silencio, porque la prudencia te ayuda a llegar más fácil al objetivo. Algo bueno está por venir.

Lucas 1, 46-56. Bienaventurada
22/12/2025 | 2 min
1) Grandeza: Es importante en la vida ser agradecidos, porque hay mucha gente que se la jugó por nosotros. No dejes tu acción de gracias por siempre estar mirando lo que te falta. Hay que aprender que de todos necesitamos ayuda y que siempre tenemos que mirar lo que tenemos. No podés siempre andar diciendo que necesitas esto o lo otro. Te entiendo que siempre hay necesidades, pero no por eso todo el tiempo tenés que andar mostrándote como un mendigo de la vida. Hoy mira lo que viviste en todo el 2025 y descubrí que lograste otro año vivir con luces y sombras, pero que seguís aquí. 2) Humildes: En María vemos la humildad. Es por ello que te recuerdo que es esencial en esta vida ser humildes. No podés andar mostrando a todo el mundo lo que haces y lo que no haces. No puede ser que siempre te muestres a los demás diciendo quién sos y mucho menos buscando cómo aparecer en cada acontecimiento que sucede. Una cosa es ser soberbio y otra cosa es llamar la atención, pero la humildad implica pasar desapercibido y actuar con convicción. 3) Tres meses: La verdadera enseñanza que nos deja María hoy es que el ayudar al otro implica dar una mano, pero por un tiempo ,y luego soltar. No podemos ser ayudantes eternos de ese otro, y mucho menos generar dependencia. Ayudar es momentáneo y es un empujar para que el otro pueda salir, y no significa ayudar al otro para manipularlo y que luego dependa de mí. Algo bueno está por venir.

Mateo 1, 18-24: Preparativos
21/12/2025 | 1 min
1) El origen: Es importante volver a uno mismo y recordar de dónde uno viene. Es muy fácil que se te suban los humos y que te creas ser algo que no sos. Uno de los problemas que puedes llegar a tener en esta vida es creerte ser algo que no sos y también el olvidarte de dónde venís. Cuando vos te olvidas de dónde venís y te crees algo que no sos, podés estamparte en la vida porque vivís en plena fantasía y no asumís la verdad. 2) María: En ella aprendemos que la voluntad de Dios de una u otra manera se cumple. La vida es asumir lo que Dios ya tiene planeado. Voy aprendiendo con la vida que por más que uno haga millones de cosas la voluntad de Dios se cumple. Abandonarse a los brazos de Dios es un desafío, pero también una tarea. 3) San José: Es comprender que tenés que ser dócil con Dios y que con el tiempo uno aprende a aceptar lo que Dios quiere. No es necesario hacer grandes cosas para ser feliz, sino más bien es hacer lo que Dios quiere que hagas para vivir. Hoy pidamos a san José aprender a ser dóciles en la vida y vivir la vida como viene. Algo bueno está por venir.

Lucas 1, 26-38: El ángel
20/12/2025 | 1 min
1) Perteneciente: Tu cultura y tu tierra, así como también tu familia, hablan de tu identidad. Por tanto, aprende a aceptar tu identidad y deja de renegar de la familia o del lugar que vienes. Es necesario saber que en tu vida lo que viviste y la familia de la cual venís, hablan de tu modo de ser y de ver las cosas. Hay cosas que fui aprendiendo con el tiempo, a cambiar de visión. Yo vengo de una familia que no era católica al 100%, donde no estaba metida la cultura de ir a misa o de rezar y mucho menos de un razonar cristiano. Pero, con el tiempo, fui discerniendo y aprendiendo en el día a día a ver qué sí y qué no tomar. Por eso es importante también ver qué cosas tomar y qué cosas necesariamente soltar de lo que viviste, de tu familia.2) No temas: La valentía no significa ausencia de miedo, sino la capacidad de enfrentar el miedo por lo que uno ama y quiere salvar. Por eso, una persona que ama es capaz de jugarse a pesar del miedo, porque su convicción por lo que ama y quiere la lleva a jugarse, a pesar del miedo. Hoy aprende a ser valiente y no dejes que el miedo te paralice y te lleve a no tomar decisiones por tu vida y por tus ganas de vivir. 3) Para Dios: Recordá que para Dios no hay nada imposible y que siempre tenés que ver la vida sabiendo que Dios todo lo acomoda a su debido tiempo, porque el tiempo es sabio y la sabiduría viene con el tiempo. Cuando uno aprende a reconocer las cosas con el tiempo, la experiencia alimenta el intelecto y el aprendizaje de cada experiencia alimenta la sabiduría. Algo bueno está por venir.



Reflexión diaria del Evangelio por el P. Luis Zazano