Powered by RND
PodcastsReligión y espiritualidadReflexión diaria del Evangelio por el P. Luis Zazano

Reflexión diaria del Evangelio por el P. Luis Zazano

Misioneros Digitales Católicos
Reflexión diaria del Evangelio por el P. Luis Zazano
Último episodio

Episodios disponibles

5 de 2201
  • Mateo 15, 29-37
    Se sentó 1) Multitud: Acordate que la aprobación de la gente no siempre es la misma que determina la aprobación de Dios. Porque puede que le estés agradando a toda la gente, a esa multitud de personas que te rodean, pero no a Dios, por el simple hecho de que te empiezas a hacer un hipócrita. Hay veces que creemos que si le agradamos a la gente entonces le agradamos a Dios y, con el tiempo, me di cuenta que es un error. Me dí cuenta que estaba bastante equivocado, hasta me enfermé por creer ello y buscar agradar a la gente. Mira la biblia y verás que la prostituta desagradaba a la gente, el publicano desagradaba a la gente, todos con los que Jesús comía le desagradaban a la gente. Hasta pensamos que si me agrada a mí le agrada a Dios, y cuán equivocados estamos. Aprendí que nadie tiene altura moral para juzgar. Cuando inicié siendo un cura jovencito juzgaba a la gente creyéndome el dueño de la verdad. Bastaron dos años de mi vida para cometer grandes errores y darme cuenta que la vida no es fácil, y que también yo me embarré, me equivoqué y caí y, lo más curioso de todo esto, es que me ayudaron a levantarme los mismos que yo juzgué. Por tanto, no busques quedar bien con la multitud y evita juzgar, porque solo hay que hacer las cosas por y para Dios. 2) Glorificaban: En este tiempo de Adviento, en este mes de diciembre, creo que es bueno poder mirar todo lo que hicimos este año y ser agradecidos, porque algo seguro hicimos bien. Aprende a hacer las cosas para dar gloria a Dios. Por eso piensa hoy tres cosas que hiciste este año que son un bien para vos y para los demás. Trata de pensarlo porque tenés que ofrecerlo y agradecerle a Dios por haber sido un signo de Dios para el otro. 3) Saciar: Querido amigo o amiga, no dejes de alimentar tu vida espiritual. No dejes que el activismo o la rutina te atosiguen y te hagan olvidar el para qué y el por qué está en esta vida. Usted señora, usted señor, tiene mucho que dar y sabe que tiene una misión en este mundo, no deje de hacer cosas por usted y por los demás, pero en ese orden. porque nadie puede dar lo que no tiene. Algo bueno está por venir.
    --------  
    3:17
  • Lucas 10, 21-24
    La grandeza de lo pequeño 1) Gozo: Ser sencillo es lo que te hace grande. Y lo que das, vuelve; pero recuerda que lo que callas, tarde o temprano pesa. Y lo que trabajas, tarde o temprano también se nota. Recuerda que lo que crees crea, porque lo que eres siempre habla más fuerte que lo que dices hacer. 2) Padre: Siempre la prudencia te ayuda a crecer y a saberte un grande, porque en esta vida se busca constantemente lo sobrenatural, crecer en el día a día. Por eso, pedile a Dios que te de la fuerza para seguir adelante con todo lo que te toca enfrentar y no tengas miedo de mirar al cielo, porque eso te recuerda lo pequeño que somos, pero cuánto necesitamos siempre de Él. 3) Ver: Séneca decía que no sufrimos por las cosas, sino por lo que pensamos de ellas. Recordá que vos tenés el poder de darle el significado a las cosas que vives. Y, cuando cambia el significado, cambian las heridas. Esto me recuerda a una feligresa que me dijo: “Mi papá me abandonó…”, y, cada vez que lo decía, se le llenaban los ojos de lágrimas; hasta le costaba decirlo. Después de mucho trabajo y de mucha charla espiritual logró hacer un cambio. Empezó a decir: “Ese señor se perdió de conocer a esta hija que soy hoy”. La situación no cambió, sino que cambió la interpretación que ella le dio a la situación. Ahí uno entiende que la gente herida hiere, que la rabia de otros no define tu valor, y que el pasado no tiene que seguir doliendo. Por eso en tu vida espiritual, fortaleciéndote, podrás lograr ver que las situaciones no te rompen, sino que te liberan. Algo bueno está por venir.
    --------  
    2:16
  • Mateo 8, 5-11
    El centurión 1) Rogándole: Es importante que tengas ese espacio de encuentro con Dios. Búscalo y déjate tomar por su amor. En esta vida todos tenemos una enfermedad y una herida, pero debemos aprender a dejarnos ayudar. Aprende a dejarte moldear por Dios. Una vez me enfermé y, claro, al vivir solo y no tener a nadie, no dije nada. El tema es que no quería ser molestia para nadie, y lo que era un simple resfrío casi pasó a neumonía. Lo que me salvó es que alguien se dio cuenta de que no estaba bien. No es que pedí ayuda, sino que alguien se dio cuenta. Aprendí que, si decimos en el momento que nos ayuden, puede que evitemos grandes dolores de cabeza. Por eso déjate ayudar y aprende a pedir ayuda. 2) Fe: La fe es lo que nos ayuda a seguir adelante y nos anima a luchar. Es la fe lo que nos permite levantarnos cuando estamos caídos y es la misma fe la que nos ayuda a poder madurar las heridas del pasado. Todo podrás razonarlo y hasta psicologizarlo, pero la fe es esencial para seguir adelante y construir tu vivir, incluso cuando las caídas y las crisis te hayan tirado. 3) Reino: En este día de Adviento volver a recordar para dónde vamos es esencial. Porque, nos recuerda el Adviento, que hacia el cielo vamos y que nuestros actos nos deben ayudar a llegar, porque cada obra que hagamos quedará impregnada en las personas que nos rodean. Algo bueno está por venir.
    --------  
    1:58
  • Mateo 24, 37-44
    Primer domingo de Adviento 1)Tiempos de Noé: En la figura de Noé vemos a un hombre que pasó casi toda su vida construyendo un arca por lo que todo el mundo se reía, pero luego todos le pedían que los acoja en su barca para no ahogarse. Por eso, la gente que te rodea puede reírse o burlarse de todo lo que hagas, pero, si estás convencido de lo que haces, puede que esos sean los primeros que te busquen. Alguna vez escuché “Nunca te rías de los que hacen cosas, porque luego puede que llegues a pedirles que te acojan”.2) Diluvio: En los diluvios de la vida vamos comprendiendo quiénes quedan y quiénes no. Porque los amigos van apareciendo en la vida, pero en nuestros momentos difíciles, van desapareciendo. No dejes de abrir tu vida para que entren a tu barca, pero también hay momentos que se deben cerrar las puertas de tu vida, para que no te hundan los diluvios de tu alrededor. Por eso, en este tiempo de Adviento, es necesario sostener la calma en esta etapa en donde todos se aceleran porque inicia el fin de año. Cuida tu corazón y mantén tu tiempo de oración. 3) Velar: Es importante saber velar y saber estar atento a las decisiones de tu vida, porque las cosas de la vida implican sacar tiempo y saber ver los momentos. Hay momentos en que mejor es estar callado y otros momentos en los que se necesita hablar. Dios es generoso con tu vida, por tanto, en este inicio de Adviento, sé generoso para hablar con Dios y recordar que es el tiempo para meditar el nacimiento del niño Jesús y del “Sí” de María, cuando toda la humanidad en oscuras vuelve a ver la luz para irradiar. Algo bueno está por venir.
    --------  
    2:30
  • Lucas 21, 34-36
    Cuidado1) Aturdir: Todo exceso es malo y, cuando uno pasa angustia, lo primero que busca es placer, como manera de calmar. El tema no es que uno busque lo que le apasiona para calmar su angustia, sino más bien qué es lo que busca. Por eso, cuando muchos vienen a confesarse y me plantean una adicción a la pornografía o a la bebida o a lo que sea, siempre le planteo si hay algo que le angustia o aqueja y siempre se encuentra algo. Por eso, para trabajar los excesos hay que ir primero a lo que te angustia y quita la paz. Déjate tomar por Dios y aprende a buscar lo que fortalece tu corazón en momentos difíciles, porque toda adicción es como la tarjeta de crédito; primero nos gusta y calma, pero luego debemos pagar los intereses. 2)Improviso: Tu  modo de vivir implica también saber reconocerte y mirar dónde estás parado. Porque no podés estar todos los días arriesgándote y buscando llamar la atención. Cada cosa a su debido tiempo. Por sobre todo, es ver que hay momentos y momentos. Es importante también que aprendas a planificar, porque los imprevistos aparecen, pero qué duro cuando ya te gusta vivir con improvistos todo el tiempo. Mi parroquia es gigante, comienza en las periferias de San Miguel de Tucumán y termina en el límite con Salta, tomando campo y hasta montañas. Al inicio de año siempre hago la planificación de todo el año, si no me vuelvo loco. Por eso es importante que planifiques tu vida, para que tu vida refleje el plan que tienes para tu vivir. Si no ya tu vida pasa a ser un sobrevivir. 3) Oren: No dejes de orar y hablar con Dios a tu manera, porque es importante hablar con Dios a la manera de uno. Es también bueno buscar tu método. A mi me ayuda escribir y poner por escrito lo que me pasa para contarle a Dios. También me ayuda a ver a dónde estoy parado y poder pedirle a Él que me ayude a ver y decidir para seguir caminando. Orar es confiar y confiar es amar. Algo bueno está por venir.
    --------  
    2:58

Más podcasts de Religión y espiritualidad

Acerca de Reflexión diaria del Evangelio por el P. Luis Zazano

La Meditación Diaria es preparada día a día por el Pbro. Luis A. Zazano, quien nos anima con sus meditaciones y amenos audios a adentrarnos más en el Evangelio, conocer más de la vida de nuestro señor Jesús y encontrar la paz interior. Para más info visite: https://misionerosdigitales.com
Sitio web del podcast

Escucha Reflexión diaria del Evangelio por el P. Luis Zazano, Aviva Nuestros Corazones y muchos más podcasts de todo el mundo con la aplicación de radio.net

Descarga la app gratuita: radio.net

  • Añadir radios y podcasts a favoritos
  • Transmisión por Wi-Fi y Bluetooth
  • Carplay & Android Auto compatible
  • Muchas otras funciones de la app

Reflexión diaria del Evangelio por el P. Luis Zazano: Podcasts del grupo

Aplicaciones
Redes sociales
v8.0.5 | © 2007-2025 radio.de GmbH
Generated: 12/3/2025 - 5:55:27 AM